Por una casa de Pamplona pasan el vampiro y otras visitas: el profe mambrú, en cuya cabeza vive un pájaro y en su corazón la poesía; una pulga mascota que es fiel pero un poco chismosa; un ángel desdichado que recibe unas alas por correo sin instrucciones; un vampiro con una niebla que lo sigue como perrito, no muy buen poeta pero sí muy enamoradizo.