Descubrió esa energía fugaz que sólo llega con el soplo del viento prohibido. Ésta es una novela de aprendizaje y valentía, narrada por una voz íntima y sensible. Con ella, las razones que entendemos sobre la infidelidad dan una vuelta de tuerca y revelan un panorama insólito sobre la feminidad y la entereza de la mujer. En una visita a casa del socio de su esposo, Victoria curiosea la residencia familiar y termina en la recámara principal. El dueño de ese hogar es Xavier Sanguinetti, un exitoso y atractivo hombre que vive en apariencia satisfecho y feliz con su familia. A los ojos de Victoria, nada se encuentra fuera de lugar salvo una imagen de la Virgen María en la cabecera del dormitorio que la estremece de un modo singular: en su imaginación no cesa de contemplar a Xavier de una manera sensual. A partir de ese momento despierta en Victoria la pasión. Sin renunciar a su mundo, dictado por la tradición y los viejos valores impuestos a su género, descubre sus alcances infinitos para sentir y amar. De una simple mirada, su relación con Xavier se vuelve real después de varios encuentros que le revelan una intimidad nunca antes imaginada.