Si una obra maestra es aquella que reúne todas las características sobresalientes de un artista, podemos decir que Orgullo y prejuicio es la obra maestra de Jane Austen. La ironía, los personajes definidos, los diálogos consistentes, el matrimonio y el amor como temas principales, todo está en Orgullo y prejuicio trabajado con la mayor fineza posible. Y es en su heroína, Elizabeth Bennet, donde todos esos elementos perfectos se combinan. Pocos personajes logran hacer avanzar una novela como Elizabeth Bennet. Es ella el motor de la historia con sus palabras, errores y contradicciones. Es la fuerza que nos lleva hacia adelante en un mundo de pompas y protocolos: presentaciones forzadas, bailes ceremoniosos, respetos que no se merecen, y jóvenes ansiosas por conseguir un marido. u00bfPor qué leer en el siglo XXI un clásico como Orgullo y prejuicio?