La década de 1930 estará marcada por los estragos de la Gran Depresión, la euforia del mercado automovilista que veía cómo crecían las ventas año tras año, se desvanece en los primeros años de la década, las ventas caen a niveles anteriores a 1920 y una profunda crisis hará desaparecer a las marcas más frágiles y marginales.