Londres. Corre el año 1967 y Pauline deambula sin rumbo por la mágica metrópoli contracultural de los sesenta. Tiene 21 años, trabaja en una agencia de secretarias y no suele desmelenarse, pero un inesperado encuentro cambiará radicalmente su vida: una tarde recibe la llamada de un sujeto que necesita transcribir las letras de un disco. Es Frank Zappa. Ese feliz e improbable encargo vendrá seguido por vagos flirteos, extrañas confidencias y una propuesta desconcertante: trasladarse a Los Ángeles e ingresar en la variopinta cuadrilla que allí convive y desvaría con el cantante. Aceptada la invitación, nuestra audaz mecanógrafa asistirá atónita y deslumbrada al asombroso espectáculo que se representa frente a ella. Contempkla la incansable actividad creativa de Zappa, es toda oídos durante sus peregrinos coloquios con tipos como Mick Jagger George Hariison, Eric Clapton o Rod Stewart y asiste religiosamente a los extáticos ensayos de su grupo, ceremonias por las que desfila una caterva de friquis, tunantes, colgados y entrañables soñadores. De todo ello da cuenta en este libro. Ningun admirador de Frank Zappa puede prescindir de este singular relato, una obra que, sin pretenderlo, nos acerca como ninguna otra a la vida cotidana del gran músico y al momento más explosivo de una época memorable.