Sin pasar por alto la brutalidad y la violencia que implica una confrontación armada, el historiador Pedro Salmerón aborda la Guerra de 1915 entre constitucionalistas y convencionistas para reflexionar sobre las demandas de justicia de las facciones en pugna y sus estrategias y técnicas militares. Esta es, en la pluma del autor, la "Visión de los vencidos". Cuentan que la historia la escriben los vencedores. Durante veinte años he rechazado esa frase y sus implicaciones porque sé que los derrotados también cuentan su versión. La crónica de los fracasos de la División del Norte y el Ejército Libertador del Sur ha sido narrada, durante décadas, siguiendo el guion diseñado por quienes resultaron victoriosos; por quienes tenÃan que destruir lo que representaban para imponer el modelo polÃtico bajo el cual vivimos. La versión de los vencedores, plagada de calumnias historiográficas, arranca con la premisa de que Zapata y Villa, con todo a su favor, perdieron porque no teman un proyecto nacional. Tras casi veinte años de investigación de archivo, de caminar por los campos de batalla de preguntar y cuestionarme, encontré que quizá las cosas fueron de otro 'modo.