La gran influencia de este poeta en los escritores grecolatinos clásicos es indiscutible. En la Antigüedad pocos autores fueron citados con tanta frecuencia como él. El mérito de Hesíodo estriba en que es el padre de la poesía didáctica griega. Su obra maestra, Los trabajos y los días, puede considerarse como el tipo de lírica cuya meta era instruir sobre la vida, con base en una moral práctica. Es el punto de partida de un género literario que encontrará su máxima expresión en una propuesta natural, más de enseñanza que de esparcimiento. De esta manera, en su creación se advierte una función formativa educativa. Hesíodo llevó a cabo una aportación fundamental a los valores de la cultura helena, y esa contribución puede resumirse en dos palabras: trabajo y justicia.